| Hay un lugar, lejos de este mundo preocupado
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| Donde la libertad espera, esa carga que tienes
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| Encerrados en el interior, oh, cómo tendemos a escondernos
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| Así que no irás allí conmigo
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| Hasta la orilla del río, donde el agua corre libre
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| Y puedes dejar que tu corazón
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| Ábrelo de par en par, ¿no lo abrirás de par en par?
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| Porque cariño, no estabas destinado a llevar tanta carga
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| Déjalo y podemos verlo ir
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| Por el río de la gracia, el río de la gracia
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| Y todo lo que se necesita, es un poco de fe
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| Y viene Jesús, y se lo lleva
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| Por el río de la gracia, el río de la gracia
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| Aquí está lo hermoso, ese río corre dentro de ti
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| Y puedes ir en cualquier momento, y ahí está tu Salvador
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| Te espera, Él te espera allí.
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| Echa todos tus cuidados, échalos allá afuera
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| En lo profundo del río, en el suministro interminable
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| Y siente tu corazón elevarse, de ese flujo de limpieza
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| Tan limpio y libre, tan verdadero y vivo
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| Tan cierto y vivo, tan cierto y vivo
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| Porque cariño, no estabas destinado a llevar tanta carga
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| Déjalo y podemos verlo ir
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| Por el río de la gracia, el río de la gracia
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| Y todo lo que se necesita, es un poco de fe
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| Y viene Jesús, y se lo lleva
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| Por el río de la gracia, el río de la gracia |