| Cuando los días son fríos y todas las cartas se doblan
|
| Y los santos que vemos están todos hechos de oro
|
| Cuando todos tus sueños fallan y los que saludamos
|
| Son los peores de todos y la sangre está rancia
|
| Quiero esconder la verdad, quiero cobijarte
|
| Pero con la bestia adentro, no hay ningún lugar donde podamos escondernos.
|
| No importa lo que criemos, todavía estamos hechos de codicia
|
| Este es mi reino ven, este es mi reino ven
|
| Cuando sientas mi calor, mírame a los ojos
|
| Es donde se esconden mis demonios, es donde se esconden mis demonios
|
| No te acerques demasiado, está oscuro por dentro
|
| Es donde se esconden mis demonios, es donde se esconden mis demonios
|
| A la llamada de la cortina es el último de todos
|
| Cuando las luces se apagan, todos los pecadores se arrastran
|
| Entonces cavaron tu tumba y la mascarada
|
| Vendrá llamando al lío que has hecho
|
| No quiero decepcionarte, pero estoy atado al infierno
|
| Aunque esto es todo para ti, no quiero ocultar la verdad
|
| No importa lo que criemos, todavía estamos hechos de codicia
|
| Este es mi reino ven, este es mi reino ven
|
| Cuando sientas mi calor, mírame a los ojos
|
| Es donde se esconden mis demonios, es donde se esconden mis demonios
|
| No te acerques demasiado, está oscuro por dentro
|
| Es donde se esconden mis demonios, es donde se esconden mis demonios
|
| Dicen que es lo que haces, yo digo que depende del destino
|
| Está tejido en mi alma, necesito dejarte ir
|
| Tus ojos brillan tanto, quiero salvar esa luz
|
| No puedo escapar de esto ahora, a menos que me muestres cómo
|
| Cuando sientas mi calor, mírame a los ojos
|
| Es donde se esconden mis demonios, es donde se esconden mis demonios
|
| No te acerques demasiado, está oscuro por dentro
|
| Es donde se esconden mis demonios, es donde se esconden mis demonios |