Información de la canción En esta página puedes encontrar la letra de la canción El Bueno, El Malo y El Feo (Regueton Viejo), artista - Reggaetones. canción del álbum Reggaeton Old School 2 (Regueton Vieja Escuela), en el genero Реггетон
Fecha de emisión: 22.10.2018
Etiqueta de registro: Golden Urban
Idioma de la canción: español
El Bueno, El Malo y El Feo (Regueton Viejo) |
Oye, se te quemó la cabeza |
Pues tienes tanta controversia |
Que difícil se hace tu existencia |
En un mundo cegato y criminal |
Oye, se contagió tu cabeza |
Y fuiste a probar ese mundo |
Y quedaste como un vagabundo |
Violando la regla celestial |
Oye, ¿tú no querías vida loca? |
Reggaetón, éxtasis, marihuana y coca |
En un par de meses viste ya cuál es el costo |
Vete al espejito a ver si reconoces el rostro |
Oye, se te quemaron los fusibles |
Pues ese mundo es nada flexible |
Saca del buzón como 35 cuentas |
Y ya no puede ni con la de la renta |
Y él tranquilito y ahora va histérico |
Mente caída, corazón cuadripléjico |
Se fueron los panitas, pues se fue el presupuesto |
Ya no se ve tu bling bling por to' esto |
¿Qué es esto? |
Pregunta al hacer memoria |
De cuando nadie te veía como escoria |
Y ahora eres historia, ¿y tú no eras rey? |
¿Tú no eras el capo, tú no eras la ley? |
Oye, se te quemó la cabeza |
Y él tranquilito y ahora va histérico |
Oye, se contagió tu cabeza |
Mente caída, corazón cuadripléjico |
Oye, ¿tú no querías aventuritas? |
Casao' pero en Internet chequeando nenitas |
No sacas el tiempo que merece tu señora |
Y también se te fue por ti la computadora |
Y oye, abandonaste el viejo combo |
Antes en la iglesia y ahora tocas fondo |
Echándole la culpa a los panitas y al ambiente |
Pero donde está tu corazón está tu mente |
Y hoy tú tienes oportunidades únicas |
Pero, papi, tienes que cambiarte la túnica |
Tómate una foto close-up de tu carita |
Y compara cuando estaba limpiecita, bonita |
Y siempre en acicilaera |
Pero sácate el invierno pa' que tengas primavera |
Deja ya la roncaera, nene, ponte en la tuya |
Buya, pa' que no te ahorque la cabulla |