Venid, reyes, y escuchad mi cántico:
|
Cuando Gwin, el hijo de Nore
|
Sobre las naciones del norte su cruel cetro llevó
|
Los nobles de la tierra se alimentaron de los pobres hambrientos
|
Desgarran el cordero del pobre
|
Y sacar a los necesitados de su puerta
|
Gordred el gigante se despertó
|
De dormir en su cueva
|
Sacudió los montes, y en las nubes
|
Las pancartas con problemas agitan
|
Debajo de ellos rodaron, como tempestades negras
|
Los numerosos hijos de sangre;
|
Como cachorro de león, rugiendo en el extranjero
|
Buscando su comida nocturna
|
Por las colinas de Bleron se apresuran espantosamente
|
Su grito asciende a las nubes
|
El caballo que pisotea y los brazos que resuenan
|
Como precipitaciones de poderosas inundaciones
|
La tierra humea con sangre
|
Y gemido y serpientes
|
Para beber la sangre de sus hijos
|
Un mar de sangre, ni el ojo puede
|
Ver a la orilla temblorosa
|
Hijo de Nore
|
Como el fantasma de Barraton
|
Quien se divierte en el cielo tormentoso
|
Gwin conduce a su anfitrión tan negro como
|
Noche cuando la pestilencia vuela
|
Con caballos y con carros
|
Y todos sus lanceros audaces
|
Marcha al son de la canción lúgubre
|
Como nubes a su alrededor rodaron |
Gwin levanta la mano, las naciones se detienen
|
"¡Prepárate para la guerra!" |
el llora
|
Aparece Gordered, con el ceño fruncido.
|
Problemas de nuestros cielos del norte
|
Y ahora los ejércitos furiosos se apresuraron
|
Como mares poderosos en guerra
|
Los cielos tiemblan con la guerra rugiente
|
El polvo asciende por los cielos
|
Y al borde de este mar salvaje
|
El hambre y la muerte lloran
|
Los gritos de mujeres y de
|
Chicas sobre el campo vuelan
|
El rey en cólera, lejos
|
Con todos sus hombres de poder
|
Como cometas ardientes esparciendo la muerte
|
A través de la noche febril roja
|
El dios de la guerra está ebrio de sangre
|
La tierra desfallece y falla
|
El hedor de la sangre enferma los cielos
|
Los fantasmas saturan la garganta del infierno
|
¡Oh, qué tienen que responder los reyes
|
Porque ante ese terrible trono
|
Cuando mil muertes por venganza lloran
|
Y fantasmas acusando gemido
|
Como cometas ardientes en el cielo
|
Que sacuden las estrellas de luz
|
que caen como frutos a la tierra
|
A través de la feroz noche ardiente
|
Así se conocieron Gwin y Gordred
|
Y el primer golpe decide
|
Desde la frente hasta el pecho
|
Gordred su cabeza se divide
|
Gwin cayó, los hijos de Noruega huyeron |
Todo lo que quedó vivo
|
El resto llenó el valle de la muerte
|
Por ellos se esfuerzan las águilas
|
Se fue el hijo de Nore |