| Inamovible nuestra esperanza permanece | 
| Aunque arenas movedizas ante nosotros mienten | 
| El que lavó nuestras manchas | 
| Nos llevará a salvo a los cielos | 
| Las inundaciones pueden subir, los vientos pueden golpear | 
| Caen lluvias torrenciales | 
| Sin embargo, Dios, los Suyos, no olvidará | 
| Él nos amará y nos mantendrá hasta el final. | 
| Nos amarás y nos mantendrás hasta el final | 
| Esta es la vida eterna, saber | 
| El Dios viviente y Cristo, el Hijo | 
| El Salvador no nos dejará ir | 
| Hasta que su obra salvadora haya terminado | 
| Nuestra deuda era grande, al igual que nuestra necesidad | 
| Pero ahora el precio está pagado | 
| ¿Quién puede contemplar a Emmanuel sangrar? | 
| ¿Y dudar de su voluntad de salvar? | 
| Confiamos en tu voluntad de salvar | 
| El Señor absuelve, ¿quién puede condenar? | 
| Aunque las acusaciones de Satanás vuelan | 
| Su poder nunca puede alcanzar nuestros nombres | 
| Para borrarlos del Libro de la Vida | 
| El Hijo ciertamente nos ha hecho libres | 
| Su Palabra permanece para siempre | 
| Y toda nuestra alegría es saber que | 
| están grabados en sus manos heridas | 
| Estamos grabados en tus manos heridas | 
| (Que nuestra esperanza se base en nada menos que en ti) | 
| Edificados en Cristo, seguros estamos | 
| Porque con Su Espíritu hemos sido sellados | 
| Por gracia veremos la tierra prometida | 
| Donde todo dolor será curado | 
| A Dios que dio a su único Hijo | 
| A Jesucristo, nuestro Señor | 
| A Dios Espíritu, Tres en uno | 
| Sean canciones de alabanza para siempre | 
| Cantaremos Tus alabanzas para siempre | 
| (Desde el siglo y hasta el siglo, alabado sea Tu nombre) |