| Levanta tus cuernos hacia el cielo crepuscular, la victoria es nuestra, nadie puede negarla.
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| Brindamos por nuestros camaradas que han muerto;
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| Zarpamos al amanecer con el hogar en nuestras mentes.
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| Marcha hacia la costa con las primeras luces,
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| ¡Reúne nuestro botín, son nuestros!
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| cofres de plata y oro; |
| la leyenda fue predicha
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| — Una maldición sobre esta tierra; |
| todos estamos condenados
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| ¡¡¡El dios de la muerte vendrá a nuestras almas!!!
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| Busca dentro de tu alma y encuentra la fuerza,
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| Resiste el oro, la mitad de nuestros hombres, no verán el amanecer,
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| La sed de sangre nos corrompe a todos.
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| La oscuridad se apodera de nuestra vista: ¡nos levantaremos!
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| Por la muerte que nos perseguirá esta noche
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| El orgullo nos está guiando a sobrevivir, ¡sobrevivir!
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| La suerte y el destino nos lleva a la luz
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| Las velas atrapan el viento mientras navegamos por el mar,
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| La orilla se desvanece nuestro destino que no podemos prever
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| Los cielos se vuelven negros, no hay vuelta atrás,
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| Las pupilas se agrandan, no hay tiempo para reaccionar
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| ¡Los dioses del mar se unen a la lucha!
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| Levantándose, desde las profundidades
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| La fuerza de la serpiente nos detiene en seco
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| ¡Maneja las velas! |
| ¡Defiende con poder!
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| Nuestro arco está aplastado... ¡Este es el fin!
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| ¡El tesoro ahora yace en las profundidades del mar!
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| ¡La luz de la luna se derrama sobre mí, la criatura se ha llevado a los hombres que eran libres!
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| Las mareas son fuertes, me llevan
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| Lavado en las costas, desgarrado por la guerra y aplastado
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| Espíritu, dame la fuerza para |