| Teléfono rojo sentado junto a mi cama
|
| Prácticamente llevaba tu nombre
|
| Acostado solo en la zona de penumbra
|
| Esperando a que entre tu llamada
|
| no había sido para el niño
|
| ¿Quién estaba durmiendo arriba?
|
| Me habrías encontrado bien en mi camino
|
| En ese avión de medianoche a Los Ángeles
|
| Sufriste más dulce por mí
|
| Que cualquiera que haya conocido
|
| Me atreví a mirar en los años
|
| ¿Seguirías teniendo a tu esposa?
|
| Me atreví a mirar a través de mis lágrimas
|
| ¿Podríamos tener una vida?
|
| Incluso pensé que estaba embarazada de ti
|
| pero no me importaba
|
| acabo de hablar con mi hijo
|
| ¿Le importaría otro?
|
| Sufriste más dulce por mí
|
| Que cualquiera que haya conocido
|
| Una vez más la niebla rueda hacia el mar
|
| Como cien veces lo hemos sabido
|
| Los árboles se desvanecen y las nubes se han detenido.
|
| Donde el viento había soplado
|
| Cómo temo cuando llega la noche
|
| Y no puedo ser
|
| lo que quieres que sea
|
| cuando estas junto a mi
|
| Cuán silencioso eres cuando bajan los velos
|
| ante mis ojos
|
| Suave y reservado a medida que te alejas
|
| poniéndote tu disfraz
|
| Mientras que todas las canciones folklóricas que he conocido
|
| Una vez más se hace realidad
|
| Y el amor envejece
|
| y se enfría
|
| Sufriste más dulce por mí
|
| Que cualquiera que haya conocido
|
| Solo un favor tuyo, mi amor
|
| Si tuviera que morir hoy
|
| Llévame a donde las colinas
|
| Conoce el mar en un día tormentoso
|
| Montar una cresta en un caballo blanco como la nieve
|
| Y tirar mis cenizas lejos
|
| Al viento y la arena
|
| Donde empezó mi canción
|
| Sufriste más dulce por mí
|
| Que cualquiera que haya conocido |