| Me encuentro con mi Señor junto al río
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| Me golpea casi siempre
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| La belleza es tan profunda que es difícil dormir por la noche
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| Este es el capitulo del bosque
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| Cada línea, y cada De mi corazón viene a raudales
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| En cada melodía
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| Llama sin humo
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| Aprovecha toda la poesía
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| Juro que nunca me ahogaré
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| Porque solo hablo de Narmada
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| Hara Hara todos los días
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| Haz que mi amor baje a sus aguas
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| Llamando al motor de arranque de la montaña
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| No más libros, no más palabras vacías
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| No más huir de ella
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| ahora aprendo del viento y la lluvia
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| Del canto de la melena del león
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| Y como toca el sol y la luna
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| Me siento y contemplo esa tumba
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| De gloria sobre su nombre
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| Nosotros decimos hara hara hara Narmada
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| Bueno, el simple transpira
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| Con una cara que quema como el fuego
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| Ahí es donde pongo mi cuerpo
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| Sí, y en mi sueño escuché la lección
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| De la bóveda que sostiene los cielos en
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| Así que ahora miro a la multitud, sí
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| Ves mi mujer ella es inoxidable
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| la deslizo por la base
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| Toca la cara, todos los dioses salen de la montaña
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| Abrazo dulce
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| Ves su canción, no se puede escuchar
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| A menos que te sueltes del mundo
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| Así que lo dejé todo
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| Y contemplo lo que escuché
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| No más libros, no más palabras vacías
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| No más huir de ella
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| ahora aprendo del viento y la lluvia
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| Del canto de la melena del león
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| Y como toca el sol y la luna
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| Me siento y contemplo su tumba
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| Toda la gloria sobre su nombre
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| Nosotros decimos hara hara hara Narmada |