Información de la canción En esta página puedes encontrar la letra de la canción Johhny McEldoo, artista - Tommy Makem.
Fecha de emisión: 17.09.2009
Idioma de la canción: inglés
Johhny McEldoo(original) |
There was Johnny McEldoo and McGee and me |
And a couple of two or three went on the spree one day |
We had a bob or two, which we knew how to blew |
And the beer and whiskey flew and we all felt gay |
We visited McCann’s, Maclaman’s, Humpty Dan’s |
We then went into Swan’s, our stomachs for to pack |
We ordered out a feed, which indeed, we did need |
And we finished it with speed, but we still felt slack |
Johnny McEldoo turned red white and blue |
As a plate of irish stew he soon put out of sight |
He shouted out «Encore!» |
with a roar for some more |
That he’d never felt before such a keen appetite |
We ordered eggs and ham, bread and jam, what a cram |
But him, we couldn’t ram, though we tried our level best |
For everything we brought, cold or hot, mattered not |
It went down him like a shot but he still stood the test |
He swallowed tripe and lard by the yard, we got scared |
We thought it would go hard when the waiter brought the bill |
Told him to give o’er, but he swore he could lower |
Twice as much again and more before he had his fill |
He nearly supped a trough full of broth. |
Says McGrath |
«He'll devour the tablecloth if you don’t hold him in» |
When the waiter brought the charge, McEldoo felt so large |
He began to scowl and barge and his blood went on fire |
He began to curse and swear, tear his hair in despair |
And to finish the affair, called the shop man a liar |
The shop man, he threw out and no doubt, he did clout |
McEldoo he kicked about like an old football |
Tattered all his clothes, broke his nose, I suppose |
He’d have killed him with a few blows in no time at all |
McEldoo began to howl and to growl, by my soul |
Threw an empty bowl at the shop keeper’s head |
Struck poor Mickey Flynn, peeled the skin from his chin |
An a ruction did begin and we all fought and bled |
The peelers did arrive, man alive, four or five |
At us they made a drive for us all to march away |
We paid for all the meat that we ate, stood a trait |
And went home to ruminate on the spree that day |
(traducción) |
Estabamos Johnny McEldoo y McGee y yo |
Y un par de dos o tres se fueron de juerga un día |
Tuvimos un bob o dos, que sabíamos cómo soplar |
Y la cerveza y el whisky volaron y todos nos sentimos alegres |
Visitamos McCann's, Maclaman's, Humpty Dan's |
Luego fuimos a Swan's, nuestros estómagos para empacar |
Pedimos un feed que, de hecho, necesitábamos |
Y lo terminamos con velocidad, pero todavía nos sentimos flojos |
Johnny McEldoo se volvió rojo, blanco y azul |
Como un plato de estofado irlandés, pronto se perdió de vista |
Gritó «¡Encore!» |
con un rugido por un poco más |
Que nunca antes había sentido un apetito tan vivo |
Pedimos huevos con jamón, pan con mermelada, qué cram |
Pero él, no pudimos embestir, aunque hicimos nuestro mejor esfuerzo |
Por todo lo que trajimos, frío o caliente, no importaba |
Le cayó como un tiro, pero aún así pasó la prueba. |
Tragó callos y manteca por el patio, nos asustamos |
Pensamos que sería difícil cuando el mesero trajo la cuenta |
Le dije que le diera, pero él juró que podía bajar |
El doble de nuevo y más antes de que se saciara |
Casi bebió un abrevadero lleno de caldo. |
dice McGrath |
«Se comerá el mantel si no lo retienes» |
Cuando el mesero trajo la carga, McEldoo se sintió tan grande |
Empezó a fruncir el ceño y a ladrar y su sangre se incendió. |
Empezó a maldecir y maldecir, a rasgarse el cabello con desesperación. |
Y para terminar el asunto, llamó mentiroso al hombre de la tienda |
El hombre de la tienda, lo tiró y sin duda, lo golpeó |
McEldoo pateaba como un viejo balón de fútbol |
Destrozó toda su ropa, se rompió la nariz, supongo |
Lo habría matado con unos cuantos golpes en un santiamén. |
McEldoo comenzó a aullar y gruñir, por mi alma |
Arrojó un tazón vacío a la cabeza del encargado de la tienda |
Golpeó al pobre Mickey Flynn, le arrancó la piel de la barbilla |
Comenzó una pelea y todos luchamos y sangramos |
Llegaron los peladores, hombre vivo, cuatro o cinco |
En nosotros hicieron un viaje para que todos nos marcháramos |
Pagamos por toda la carne que comimos, mantuvimos un rasgo |
Y se fue a casa a reflexionar sobre la juerga ese día |