| Limoneros, podría sentarme allí durante horas
|
| Las flores hablaron, y la lluvia se sintió como verano
|
| Campos dorados, como una valla alrededor de nuestro reino
|
| Y cada rama era un nuevo muro de sabiduría
|
| Estábamos a salvo, estábamos a salvo en nuestro cielo
|
| Y los piececitos correteaban por el jardín
|
| Pero luego aprendimos, aprendimos sobre el duelo
|
| Y todo se había ido, como el jardín del Edén
|
| Y así sigue la historia
|
| De piececitos que marcharon a la iglesia a tu funeral
|
| Se preguntaron si alguna vez conseguirían el amor de una madre.
|
| Pero les dijeron que se volverían a encontrar.
|
| En el Jardín del Edén
|
| En la funda de la almohada, muchas lágrimas hicieron sus patrones.
|
| Noche y día, mientras los muros a su alrededor se derrumbaban
|
| Ahora otros pies corretean por nuestro jardín
|
| Pero en la escuela nos reíamos, era nuestra armadura mágica
|
| Y así sigue la historia
|
| De piececitos que marcharon a la iglesia a tu funeral
|
| Se preguntaron si alguna vez conseguirían el amor de una madre.
|
| Pero les dijeron que se volverían a encontrar.
|
| En el Jardín del Edén
|
| Y escucharon historias, sí, la gente predicó
|
| Sobre una tierra donde descansan los ángeles
|
| Que nos está mirando y está orgullosa
|
| Solo tenemos que hacer nuestro mejor esfuerzo
|
| Así que cerré mi puerta y canté
|
| Toqué la guitarra hasta que me sangraron los dedos
|
| Un día volveré a comprar nuestra casa.
|
| Y la madre que nunca tuve
|
| Y así sigue la historia
|
| De piececitos que marcharon a la iglesia a tu funeral
|
| Se preguntaron si alguna vez conseguirían el amor de una madre.
|
| Pero les dijeron que se volverían a encontrar.
|
| En el Jardín del Edén |