| Dicen que la ambición es enemiga de la grandeza
|
| Y la grandeza es enemiga de la fama
|
| Cuando recojo mi guitarra
|
| Y trato de escribir una canción
|
| Pienso en lo que solía decir mi mentor:
|
| «¿A quién carajo le importa un culo de rata, Steve?
|
| Solo escribe una canción de amor
|
| Porque mantendrán tu barriga llena
|
| Y tu billetera forrada
|
| No molestes a estas buenas personas.
|
| Con tus tristes canciones de saco
|
| Si me preguntas
|
| Creo que son solo una pérdida de tiempo»
|
| La inspiración es la mejor amiga de mi dolor
|
| Y la pena es la mejor amiga de mi trago
|
| Bueno, quiero mirarme a los ojos mañana
|
| Pero estoy demasiado preocupado por lo que pensarán los demás.
|
| «¿A quién carajo le importa un culo de rata, Steve?
|
| Solo escribe una canción de amor
|
| Ver a un consejero
|
| Si necesitas aliviar tu mente atribulada
|
| ¿Y podrías sentarte allí?
|
| No quiero que llores en mi cerveza
|
| ¿Quieres un poco de queso con todo ese gemido?»
|
| Hay una canción que sigo tratando de cantarle a nadie
|
| Pero me temo que es demasiado corto o demasiado largo
|
| Y para agregar a todas las cosas que tengo miedo
|
| El diablo dejó de enviarme sus canciones
|
| Y los problemas en mi corazón necesitan salir
|
| Los problemas en mi corazón necesitan escapar
|
| Y nunca me gustó escribir poesía
|
| Y nunca me gustó hacer cerámica
|
| Y Dios sabe que nunca aprendí a pintar
|
| Entonces, de vez en cuando, cantaré una canción triste
|
| Porque mantiene mi espíritu ligero, mi conciencia limpia
|
| Y si no te importa escucharlo
|
| No me importa si sales a tomar un poco de aire
|
| Porque estoy feliz de que seas más feliz que yo
|
| Estoy feliz de que seas más feliz que yo.
|
| Estoy feliz de que seas más feliz que yo. |