| Bien conocido, bien conocido, mi verdadero amor,
|
| bien conocido, bien conocido, dijo él.
|
| Te has ido con otra, mi amor,
|
| y así me abandonó.
|
| no lloro por mi corazón roto,
|
| y ni por tu voto roto,
|
| es para tus hijos que preguntan por ti,
|
| que estoy llorando ahora.
|
| Y yo solo soy un carpintero de casas,
|
| eso es todo lo que quiero ser,
|
| pero me quitaste todo lo que tenía,
|
| y se robó a través del mar.
|
| Pero déjalo en manos de un mensajero,
|
| para solo traer malas noticias,
|
| sobre la marcha me trajo a lo mio,
|
| ninguno que pudiera usar.
|
| Zarpa, zarpa, dijo el capitán,
|
| Tengo lo que he venido a buscar,
|
| él le dio a ella las tierras más extrañas
|
| ella nunca había visto antes.
|
| Y yo solo soy un carpintero de casas,
|
| eso es todo lo que quiero ser,
|
| pero me quitaste todo lo que tenía,
|
| y se robó a través del mar.
|
| He escuchado historias tristes toda mi vida,
|
| pero ninguna tan triste como esta,
|
| a una milla de la costa se desató una tormenta,
|
| y removió ese negro abismo.
|
| El gallardo barco giró una vez alrededor,
|
| ella oró perdóname por favor,
|
| demasiado tarde, demasiado tarde, dijo el primer oficial del diablo,
|
| tu alma pertenece a los mares.
|
| Y yo solo soy un carpintero de casas,
|
| eso es todo lo que quiero ser,
|
| pero me quitaste todo lo que tenía,
|
| y se robó a través del mar.
|
| Ahora, no soy un hombre de muchas palabras,
|
| o uno de gran discernimiento,
|
| hay muchas lecciones que nos enseñan
|
| y pocas que aprenderemos.
|
| Lo que puedo decir sin arrepentimiento,
|
| para guardarte de la ira,
|
| contentarte con tu circunstancia,
|
| sé feliz con la vida que tienes. |