| Has navegado las aguas centelleantes | 
| De la sombreada costa arenosa de Carolina | 
| Desde la costa rocosa de Maine | 
| Más allá de Virginia hasta los soleados cayos de Florida | 
| Has perseguido el viento silbante a lo largo | 
| Las paredes pintadas del cañón de Colorado | 
| Y seguiste ese gran río desde | 
| San Pablo hasta donde ella desemboca en el mar | 
| Has visto el beso de la luz del sol temprano | 
| La hierba azul en una mañana fría de Kentucky | 
| Y los océanos Palomino de Kansas | 
| Campo de trigo cuando sopla el viento del oeste | 
| Eres un gitano, suelto y corriendo | 
| Persiguiendo arco iris en el atardecer de Mississippi | 
| Solo un gran levantador de infiernos número uno con el | 
| Gusto por el whisky, las mujeres y el camino | 
| Y ya no hay más excursionistas | 
| Y puedes tomar eso por lo que vale | 
| Parece que todo el mundo es jet'n | 
| No tienen tiempo para tocar la tierra | 
| Supongo que sus pies no llegan a picar | 
| Cuando escuchan el silbato | 
| Eso no ha cruzado el Chattahoochee | 
| Y ya no hay más excursionistas | 
| Has oído el cascabeleo solitario de la | 
| Tren de carga de medianoche en las horas tranquilas | 
| Te ha quemado el sol de Arizona | 
| Estaba temblando en la nieve de Minnesota | 
| Has olido la dulce flor de magnolia | 
| Perfume en una noche de Alabama | 
| Te has parado borracho al lado de la carretera y deseaste | 
| Al diablo, todavía te quedaba un lugar al que ir | 
| Porque ya no hay más excursionistas |