| Vadeando entre cenizas
|
| Una noche para matar es todo lo que necesitan
|
| Los niños del infierno ardiendo
|
| Convertir la ley de la iglesia en anarquía
|
| Guardianes de los peregrinos
|
| Banqueros de reyes
|
| Tal vez se arrepientan
|
| El olor a sangre es fuerte
|
| que tiñe la noche trágica
|
| Lágrimas sellando las mentiras
|
| En el amanecer del hereje
|
| La señal de Dios en el lino polvoriento
|
| La vida está jurada a la pobreza
|
| Las ilusiones borrachas de un santo padre
|
| Ordenándoles que crucen el mar
|
| Al polvo y al calor donde se reproducen los paganos
|
| Guardianes de los peregrinos
|
| Banqueros de reyes
|
| A los pasillos de David vagan
|
| Derribar Jerusalén
|
| La sed de las mentes enfermas
|
| Lágrimas sellando las mentiras
|
| En el amanecer del hereje
|
| Todo lo que alguna vez temieron fue que las mentiras se convirtieran en verdad
|
| Mientras rompía los lazos de los círculos clericales
|
| Los que socavaron la vida de sus sirvientes
|
| Lágrimas sellando las mentiras
|
| En el amanecer del hereje
|
| Todo lo que alguna vez temieron fue que las mentiras se convirtieran en verdad
|
| Mientras rompía los lazos de los círculos clericales
|
| Los que socavaron la vida de sus sirvientes
|
| Todo lo que alguna vez temieron fue que las mentiras se convirtieran en verdad
|
| Mientras rompía los lazos de los círculos clericales
|
| Los que socavaron la vida de sus sirvientes
|
| No hay nada más que silencio
|
| No hay nada más que probar
|
| Vivíamos una vida de violencia
|
| Vivimos una vida de dolor
|
| Estamos vadeando las aguas
|
| Hacia la luz blanca brillante
|
| Y recuerdos de este día
|
| Nunca morirá |