| Mientras conducía por el norte de Pensilvania en un frío día de diciembre
|
| Se enfureció por la cantidad de cazadores de ciervos «en juego»
|
| Se juró a sí mismo que no ignoraría en absoluto
|
| Esta actividad retorcida que deploraba profundamente...
|
| Así que se coló en el bosque para dejar a algunos hijos y papás.
|
| Se subió a un puesto de árboles y se fumó un
|
| A lo largo vino un fanático de la explosión de ciervos
|
| Los lugareños calificaron su muerte de «accidente» y «trágica»
|
| Temporada abierta para la matanza de cazadores
|
| Temporada abierta para la matanza de cazadores
|
| Temporada abierta para la matanza de cazadores
|
| Temporada abierta para la matanza de cazadores
|
| No pasó mucho tiempo antes de que volviera a hacerlo.
|
| Actuar sabiendo que la caza es una enfermedad y debe terminar
|
| Un manto de nieve fresca estaba en el suelo
|
| El día que el cazador mató a trece
|
| Los masacró como cerdos de fábrica
|
| Apiló cerca de un cordón de troncos humanos
|
| «Oye tú, ¡PARA!» |
| alguien gritó
|
| ¡Era el guardabosque, así que corrió como el demonio!
|
| Su odio al cazador balísticamente ventilado
|
| Había provocado una situación bastante premonitoria
|
| Corrió... Corrió...
|
| Se abrió paso entre los arbustos con la velocidad de un ciervo.
|
| El guardabosque bulboso ya no estaba cerca
|
| Dio vueltas astutamente y finalmente llegó a su auto.
|
| Brindando por su fuga con dos cuartos de galón de un bar
|
| Conducía, bebiendo cerveza para calmar sus nervios.
|
| Él condució…
|
| Solo pasaron días antes de que regresara al bosque.
|
| Para sofocar este deporte enfermizo tanto como un hombre pueda
|
| Pasaba el tiempo libre contemplando sueños fantásticos…
|
| El fin de toda locura humana tan cruel y descaradamente obscena
|
| Él espió presas en su punto de mira
|
| Un oso de caza enfermo
|
| Hunter apretó su arma y sonrió con ironía.
|
| Este patético «deportista» se iba a morir
|
| Gritó «¡Oye, vete a la mierda, tonto!»
|
| La ronda 30-06 le atravesó la barriga
|
| Siguió el rastro de sangre pero no corrió
|
| Derrumbó la cabeza de la presa con la culata de su arma
|
| Hunter todavía acecha en los bosques de
|
| ¡Noreste de Pensilvania! |