| Temblando, sudando, oliendo a muerte
|
| Veneno de etanol en mi aliento
|
| Despierta cada día para sentir este dolor
|
| Parece que he vuelto a hacer lo malo
|
| Dios, amaba a esa chica de al lado
|
| Pero ella me hizo derramar en el piso
|
| Me abrió la cara como vides podridas
|
| Un olor tan dulce como la sangre divina
|
| Solo pensamos que habíamos tenido algunos
|
| Y no podía pensar en nada más que hacer
|
| Con coraje holandés y encanto diabólico
|
| Pensé que podría torcer su brazo
|
| Ella me desnudó en el baño
|
| Y rompí mi cabeza en el hogar
|
| Me arrastró y me envolvió
|
| Me enterró profundamente, me dejó allí para pudrirme
|
| Arañando a través del suelo, buscando aire fresco
|
| Vida alucinante, perdida en mi desesperación
|
| Escapando por fin de mi pozo subterráneo
|
| Una cabeza palpitante, una boca con sabor a mierda
|
| Los demonios se burlan, animándome a alimentar
|
| Para buscar en las calles el veneno que necesito
|
| Carnage me golpea fuerte mientras tropiezo
|
| La ciudad asolada por el pánico
|
| Terror por todas partes mientras los cuerpos se pelean
|
| Para obtener el cuello y mantenerlo presionado
|
| No podía esperar al fin de semana, listo para ir a la ciudad
|
| Pero tuve un final muy amargo cuando ella me golpeó con frialdad.
|
| Ya no es humano, es un monstruo salvador, la bestia interior desatada
|
| Irrumpiendo a través de puertas golpeando buscando mi festín líquido
|
| Cabeza inclinada hacia atrás garganta abierta, el más bajo de todos los hombres
|
| Siente el cambio a medida que mi fuerza regresa haciendo la danza de la destrucción de nuevo |