| Puede que te resulte difícil recordar cuando me miras ahora
|
| Pero una vez, hace mucho tiempo, te juro que tenía doce años
|
| No tenía respeto por la gente, por nadie.
|
| Solía divertirme solo, divertirme solo
|
| Pero tenías un rostro amable con labios tan llenos, rápido como un predicador
|
| Así que pasarías todo el día en el gimnasio para parecer luchadores.
|
| Aún así mantuviste esta mirada tan comprensiva como una maestra de preescolar
|
| Tu estatua de un hombre con todos esos músculos y vello en el pecho
|
| Oye, oye, ¿no te quedarás?
|
| En uno de mis castillos
|
| Podríamos tenerlo todo (Oye, oye)
|
| Y luego en la escuela siempre me enamoraba de los cantantes
|
| Como un pequeño tonto que era, nunca me enseñaron a cantar
|
| Los chicos con pianos no querían lastimarse sus bonitos dedos.
|
| Y juré quedarme doce hasta que te vuelva a ver mi rey
|
| Con cada pecado la red de piel se vuelve un poco más débil
|
| Mi pariente más cercano está teniendo hijos, ellos comienzan a crecer primero
|
| Y todos los días como y luego me pongo un poco más enfermo
|
| Un cáncer que mata tan lento que olvidas que existe
|
| Oye, oye, ¿no te quedarás?
|
| En uno de mis castillos
|
| Podríamos tenerlo todo (Oye, oye)
|
| A veces pienso que es mejor simplemente ir antes de mi tiempo
|
| Así que al menos podría sentir que tengo la vida en mis propias manos
|
| Pero los estados de ánimo se turnan para torturarme con su llegada
|
| Y mi propia cabeza me juega malas pasadas olvidando lo que quise decir
|
| Estoy olvidando quién era cuando estaba contigo cariño
|
| Estoy olvidando y mi cara se convierte en un montón de azul
|
| No puedes irte antes de saber lo que es el amor, dijiste ser encantador
|
| No antes de conocer el amor, oh Dios, estaba enojado contigo
|
| Oye, oye, ¿no te quedarás?
|
| En uno de mis castillos
|
| Podríamos tenerlo todo (Oye, oye) |