| Oh, no sé si es la lluvia que cae
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| Hay algo en mis ojos como el mar brillante
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| Oh, no sé si es una nueva llamada de amor
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| Hay algo que crece en mí y es fuerte y libre
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| ¡Oh, es fácil decirte que te amo!
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| Dejar ir todo lo que me retiene
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| Porque eres un hombre de verdad, eres cálido y fuerte
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| Y acostado aquí a tu lado es donde pertenezco
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| Así que vamos, vamos, quiero probar la miel silvestre
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| Es dulce en tus labios y me hace sentir
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| A gusto con el hombre en mí
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| Sigue sigue sigue moviéndote hacia mí
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| Con la gracia y el ritmo de la lluvia cálida que cae
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| Sigue, sigue, sigue haciéndomelo
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| Tengo la sensación de que será una nueva mañana brillante
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| ¡Oh, es fácil decirte que te amo!
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| Dejar ir todo lo que me retiene
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| Porque eres un hombre de verdad, eres cálido y fuerte
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| Y acostado aquí a tu lado es donde pertenezco
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| Así que vamos, vamos, oh cariño, no me molestes
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| Sabes que no hay nada que no me va a complacer
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| Soy fácil con el hombre en mí
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| Así que vamos, vamos, quiero probar la miel silvestre
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| Es dulce en tus labios y me hace sentir
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| A gusto con el hombre en mí
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| ¡Oh, es fácil decirte que te amo!
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| Dejar ir todo lo que me retiene
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| Porque eres un hombre de verdad, eres cálido y fuerte
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| Y acostado aquí a tu lado es donde pertenezco
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| ¡Y es fácil decirte que te amo!
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| Dejar ir todo lo que me retiene
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| Porque eres un hombre de verdad, eres cálido y fuerte
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| Y acostado aquí a tu lado es donde pertenezco |