| Tu amante es violinista, es canoso y jorobado.
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| Es muy celoso, no te ama y te golpea.
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| Pero cuando toca el Concierto de Sarasate,
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| Tu corazón, como un pájaro, vuela y canta.
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| Es Alfonso por vocación. |
| El sabe los secretos
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| Y sabe sacar un cero de una mujer...
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| Pero cuando sus chirimías anhelan,
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| ¡Es un príncipe divino, es Pierrot enamorado!
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| Te arrugó, te rompió, te robó, te despersonalizó.
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| Femme de luxe logró convertirse en femme de chambre.
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| Y ha estado fuera de moda durante mucho tiempo, ha sido indecente durante mucho tiempo.
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| Tu campera de topo con un ligero aroma a ámbar.
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| Y en una cara cansada, y en una manera de sostener
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| Tanto la negligencia como la pereza aparecieron en ti.
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| ¿Es posible reírse con tanta amargura, con tanta maldad?
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| ¿Es posible pisotear las lilas con los tacones?..
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| Y cuando tú, sufriendo las caricias de los rudos,
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| Llorando en silencio en algún lugar de la esquina, sin respirar, -
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| Te toca su Concierto de Sarasate,
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| ¡De la que sangrará el alma!
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| Feo, innecesario, enfermo y panza,
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| Odiándolo, despreciándose a sí mismo,
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| Perdonas todo por el Concierto de Sarasate,
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| ¡Amar frenética, loca y dolorosamente! .. |