| ¿Por qué no me ayudas y yo te ayudo?
|
| Encuentra una ventana y yo la veré a través
|
| Está por todas partes, puedo oírlo llamando
|
| Aunque solo soy un hombre
|
| Las estrellas están tranquilas pero tú estás al teléfono
|
| Estoy cantando, nena, déjame en paz
|
| Escucho tu voz ahora, como una hoja de afeitar
|
| y los libros se caen de la pared
|
| Enciende tu luz nena, es tan oscuro como una cueva
|
| Y todos tenemos algo de tiempo para pensarlo
|
| En lo alto de la colina, su sangre bebiendo,
|
| abajo en la horca están en la carrera,
|
| arriba en la montaña, a los siempre claros,
|
| todos esos ángeles han perdido sus alas
|
| Enciende tu luz nena, es tan oscuro como una cueva
|
| Y todos tenemos algo de tiempo para pensarlo
|
| Nuestros recuerdos desvanecidos de otro mundo,
|
| capturado y roto, escondido en la tumba
|
| Tenemos sabiduría, tenemos muchas almas,
|
| no volvería a inventar mi vida
|
| Enciende tu luz nena, es tan oscuro como una cueva
|
| Y todos tenemos algo de tiempo para pensarlo
|
| Oh, dame amor ahora, hasta que me caiga, la destrucción ardiente está por todas partes
|
| Pero el domingo por la mañana puedo ver el amanecer sobre este mundo roto
|
| Enciende tu luz nena, es tan oscuro como una cueva
|
| Y todos tenemos algo de tiempo, sí, todos tenemos algo de tiempo
|
| Cariño, todos necesitamos algo de tiempo para pensarlo |