| Te escapaste con tu conciencia querida
|
| Había una bandera roja ondeando en mi oído que decía
|
| «Aléjate, tienes algo que temer»
|
| Bueno, ¿por qué no elegí escuchar?
|
| Bueno, he terminado con el sufrimiento
|
| Voy a tomar mejores decisiones, no necesito ningún anillo de bodas
|
| Puedo cantar, puedo bailar
|
| Pero no puedo hacer que cese este sentimiento
|
| Porque en lo profundo de mi alma dejaste un pliegue permanente y
|
| Todos tenemos nuestra cruz para llevar
|
| Nuestra estrella de David, nuestro cabello con rastas
|
| Y, oh sí, nena, todavía me importa
|
| Y si necesitas ayuda
|
| Sabes que siempre estaré ahí
|
| Bueno, ha sido un año extraño
|
| has sido un perro muy malo
|
| Como mi fuego se apagó
|
| Pondrías otro registro
|
| Pero valió la pena nunca tener paz
|
| Y en lo profundo de mi alma dejaste un pliegue permanente y
|
| Todos tenemos nuestra cruz para llevar
|
| Nuestra estrella de David, nuestro cabello con rastas
|
| Y, oh sí, nena, todavía me importa
|
| Y si necesitas ayuda
|
| Sabes que siempre estaré ahí
|
| Algunas noches pensé que lloraría para siempre
|
| Le desearía que se fuera y luego me convertiría en un mendigo
|
| Pero valió la pena rasparme siempre las rodillas
|
| Y en lo profundo de mi alma dejaste un pliegue permanente
|
| Llevo mi corazón como una arruga en mi manga
|
| Y tengo el amor doloroso que solo tú puedes aliviar
|
| Pero no tengo miedo de hundirme con un amigo que se hunde
|
| Voy a vivir mis sueños incluso si me matan al final
|
| Todos tenemos nuestra cruz para llevar
|
| Nuestra estrella de David, nuestro cabello con rastas
|
| Y, oh sí, nena, todavía me importa
|
| Y si necesitas ayuda
|
| Sabes que siempre estaré ahí |