| Escuchas una canción y no se parece a ninguna canción que hayas escuchado antes
|
| Piensa: «¿Qué es esto, quién es aquello?» y lo llevas a la tienda de discos
|
| Y compras el disco de esta canción, te lo llevas a casa y lo escuchas toda la noche
|
| Hasta la mañana, nace un sueño y
|
| Te despiertas con la misión de comprar esa paliza de Gibson colgada en la tienda
|
| Cortar yardas, vender tarjetas de béisbol, lo que sea necesario hasta que te caigas
|
| Un puñado de billetes de dólar arrugados en el mostrador
|
| Y tocas esa cosa hasta que tus dedos sangran donde las cuerdas te cortan
|
| Pero no puedes dejarlo
|
| No hay descanso para las estrellas de rock
|
| No hay sueño para los niños con guitarras
|
| Puedes matar las luces y los amplificadores
|
| Pero a los sueños no les importa si estás cansado
|
| No hay apagar la advertencia
|
| Porque estamos drogados y estamos embrujados
|
| Por la música en nuestros corazones inyectados en sangre
|
| No hay descanso, no hay descanso para las estrellas de rock
|
| Ves esa noche de micrófono abierto anunciada en la marquesina al final de la calle
|
| Apareces, te registras con un nudo en la garganta y una canción que acabas de escribir
|
| Vomitando en el cubículo del baño, pensando mucho en echarse atrás
|
| Pero dicen tu nombre y es demasiado tarde para el miedo escénico ahora
|
| Manos temblando, así es tu voz, buscando a tientas los cambios de acordes
|
| Pero aproximadamente a la mitad de la canción, el miedo comienza a sentirse como famoso.
|
| Y saboreas ese subidón, ese «nacido para hacer este» zumbido
|
| Y tratas de cerrar los ojos después del espectáculo en tu cama, pero
|
| La adrenalina no te dejará porque
|
| No hay descanso para las estrellas de rock
|
| No hay sueño para los niños con guitarras
|
| Puedes matar las luces y los amplificadores
|
| Pero a los sueños no les importa si estás cansado
|
| No hay apagar la advertencia
|
| Porque estamos drogados y estamos embrujados
|
| Por la música en nuestros corazones inyectados en sangre
|
| No hay descanso, no hay descanso para las estrellas de rock
|
| Y nunca cambia, ya sea que juegues en estadios con entradas agotadas
|
| Escuchar a toda la multitud cantando cada palabra en respuesta a ti, o estás
|
| Rasgueando más allá de la oscuridad de tu hora de dormir
|
| Estás tratando de estirar los dedos lo suficiente para tocar el primer acorde
|
| De las personitas que miran un cartel en el techo
|
| Para los Rolling Stones, sí, ambos conocen el sentimiento
|
| El hambre, el fuego, el hacer o morir, o las esposas de platino
|
| La maldición, la cura, el amor
|
| No hay descanso para las estrellas de rock
|
| No hay sueño para los niños con guitarras
|
| Puedes matar las luces y los amplificadores
|
| Pero a los sueños no les importa si estás cansado
|
| No hay apagar la advertencia
|
| Porque estamos drogados y estamos embrujados
|
| Por la música en nuestros corazones inyectados en sangre
|
| No hay descanso, no hay descanso para las estrellas de rock |