| Pasó por la calle principal ayer
|
| Y, oh, esta ciudad no es la misma
|
| Miré en la ventana y se había ido
|
| Todas esas tablas en las que había escrito
|
| Nos desvanecemos como si nunca hubiera estado allí
|
| Como los poetas y profetas que no pueden encontrar las palabras, así que miran
|
| Y todo lo que tenía sentido se ha torcido de alguna manera
|
| Perdí mi oportunidad contigo
|
| Hubo segundos, luego minutos, luego años que no podía respirar
|
| En el Pere Lachaise con el martillo el cincel y la piedra
|
| Ahora he intercambiado y suplicado por lo que creía
|
| Y vi que el nombre grabado era el mío
|
| Ahora no hay nada tan tranquilo como cuando te conocí
|
| Y no hay nada más solitario que cuando terminó
|
| Y las palabras, «Ya no estoy aquí», resuenan en
|
| «Perdí mi oportunidad contigo»
|
| Tenía el amor jugando tantos trucos conmigo
|
| Siempre me he sentido engañado de que me hicieras ir
|
| Como quitarme la vista después de dejarme ver
|
| Pero descubrí que el amor tenía algo bajo la manga
|
| Déjame esparcido como hojas por vientos que nunca soplaron
|
| Cuando capturé los inicios
|
| En la palma de mi mano era verdad
|
| simplemente te los devolvería
|
| Yo tenía diecisiete, pero sólo por un año
|
| Siempre supe que algún día terminaría aquí
|
| Y las arenas ahora han caído al atardecer de mi tarde
|
| Siempre estaba tan listo para quedarme y siempre me iba demasiado pronto
|
| Y no quiero pensar en eso ahora, pero lo hago
|
| Y mi espíritu está inquieto
|
| Porque sé que es verdad
|
| Perdí mi oportunidad contigo |