| Hacemos patrones con estrellas
|
| y susurramos pequeñas oraciones
|
| Estar en algún lugar donde no estamos
|
| y si estamos bien nos llevará allí
|
| Pero entonces la luz viene a través de la oscuridad
|
| y nuestras preguntas se desmoronan
|
| Es solo el latido de nuestros corazones y la quietud del aire de medianoche
|
| Y me siento tan abrumado que es difícil saberlo
|
| lo que estoy pensando
|
| Bajamos, bajamos, bajamos
|
| sentimos pena por nosotros mismos
|
| nos bajamos abajo abajo
|
| todos necesitamos la ayuda de alguien
|
| Hagámoslo fuerte, fuerte, fuerte hasta que haya amor y nada más
|
| Porque cuanto más das, más regresa
|
| Así que escondemos nuestras heridas
|
| y poner tiritas en nuestros miedos
|
| y mentimos a todos nuestros amigos
|
| muévete no hay problemas aquí
|
| pero luego empezará la orquesta
|
| y aparecen los violines
|
| y una pequeña melodía simple nos tiene luchando contra las lágrimas
|
| Y me siento tan abrumado que es difícil saberlo
|
| lo que estoy pensando
|
| Bajamos, bajamos, bajamos
|
| sentimos pena por nosotros mismos
|
| nos bajamos abajo abajo
|
| todos necesitamos la ayuda de alguien
|
| hagámoslo fuerte, fuerte, fuerte hasta que haya amor y nada más
|
| porque cuanto más das, más vuelve
|
| Pero la parte más difícil es cómo son las cosas.
|
| y qué tan rápido sangrarán los dedos
|
| y la gracia que necesitamos no está en las revistas,
|
| es solo espacio, en el medio, cuando respiramos
|
| Estoy abajo, abajo, siento pena por mí mismo
|
| Estoy abajo abajo abajo y necesito la ayuda de alguien
|
| hagámoslo fuerte, fuerte, fuerte hasta que haya amor y nada más
|
| porque cuanto más damos, más regresa
|
| Abajo abajo abajo
|
| Sentimos pena por nosotros mismos
|
| Bajamos, bajamos, bajamos
|
| Todos necesitamos la ayuda de alguien
|
| Hagámoslo fuerte, fuerte, fuerte hasta que haya amor y nada más
|
| Porque cuanto más das, más regresa |