| Una doncella poseída de gran belleza, | 
| De pie junto a la puerta de su propio padre, | 
| Húsares valientes estaban de servicio, | 
| Para verlos esta doncella esperó; | 
| Sus caballos cabriolaban y cabriolaban, | 
| Los accesorios brillaban como una estrella, | 
| Y mientras estaban cerca de avanzar, | 
| Jane vio a su gallardo húsar. | 
| Sus pellisses estaban colgados de sus hombros, | 
| Descuidados parecían montar, | 
| Y guerreros aparecieron estos jóvenes soldados, | 
| Espadas brillantes a cada lado. | 
| Al cuartel a la mañana siguiente tan temprano, | 
| Esta damisela se fue en su carro, | 
| Porque ella lo amaba tanto... | 
| Edward, el valiente húsar. | 
| Fue allí donde conversó con su soldado, | 
| Estas palabras se le oyó decir: | 
| Bueno, no he oído ninguno más audaz, | 
| Para seguir a mi muchacho lejos. | 
| Oh, vamos, dijo Edward, mantente firme, | 
| Y piensa en los peligros de la guerra, | 
| Cuando suene la trompeta debo estar listo, | 
| ¡Oh, no te cases con tu gallardo húsar! | 
| Edward dijo: Tus amigos debes cuidarlos, | 
| O de lo contrario estás para siempre deshecho, | 
| No te dejarán parte detrás de ellos, | 
| Por favor, mi compañía evita. | 
| Ella dijo: Si eres sincero, | 
| Tengo oro de mi tío en la tienda, | 
| Y ahora nunca nos separaremos, | 
| Me casaré con mi gallardo húsar. | 
| Mientras contemplaba sus hermosos rasgos, | 
| Las lágrimas que hicieron caer de cada ojo, | 
| me desposaré con esta hermosa criatura, | 
| Abandona las guerras crueles, lloró. | 
| Y ahora están unidos, | 
| Piensa en ellos cuando están lejos, | 
| Clama: bendícelos ahora y siempre, | 
| Oh Jane y su gallardo Hussar. |