| Bisturí, Pinzas. |
| Tíralo al suelo.
|
| ¡Nada de manos inocentes! |
| ¡Cada segundo cuenta! |
| (Jajaja)
|
| ¡Cortar! |
| A través de su piel fluye sangre espesa.
|
| ¡Sin anestesia mientras entro!
|
| Bazo descubierto, extirpado brutalmente.
|
| Tan derrochador, sabroso, comido desde dentro.
|
| Coserlo de nuevo para que sobreviva.
|
| Comer intestinos para mantenernos vivos.
|
| Trece días muriendo de hambre desde que bombardearon este lugar.
|
| Todos los caminos bloquearon el bosque repleto de minas.
|
| ¡No, no hay escapatoria!
|
| La mitad del pueblo murió, los animales huyeron.
|
| La peste acecha como una bomba de relojería.
|
| El hedor de la muerte.
|
| ¡No me arrepentiré, doctor! |
| ¡Usa tu oficio!
|
| ¡Ahora amputa mi mano para que pueda comer!
|
| Puedo comer…
|
| Forzados más allá de la cordura, se mantuvieron con vida. |
| Perdió toda su dignidad.
|
| Fórceps, Pinzas. |
| Tíralo al suelo.
|
| ¡Nada de manos inocentes! |
| ¡Cada segundo cuenta! |
| (Jajaja)
|
| ¡Cortar! |
| A través de su piel fluye sangre espesa.
|
| ¡Sin anestesia mientras entro!
|
| Más de ellos murieron, putrefactos, pero el cirujano sobrevivió.
|
| Alimentados de sus órganos, miembros, un hambre de sangre nunca satisfecha.
|
| Pronto se dio cuenta de que su ataque a la Muerte había llegado a su fin.
|
| No queda alma viviente, por su robo impulsado por el hambre. |
| ¡Los mató a todos!
|
| «¡Pero tengo que comer!
|
| ¡Solo un pedacito de mí!
|
| ¡Ven con papi!"
|
| ¡Debe comer!
|
| Veinte días casi muerto de hambre en este lugar abandonado.
|
| Encontrado por los soldados que lo trajeron de vuelta, estaba a salvo.
|
| Comatoso, no sabía qué horrores se arrastraban lentamente sobre él una vez que
|
| (A) rosa. |
| «Severos traumas de guerra», le dijeron.
|
| Protector bucal. |
| Correa. |
| Tíralo al suelo.
|
| ¡Nada de manos inocentes! |
| Cada segundo cuenta.
|
| Se comió su propia lengua. |
| Fluye sangre espesa.
|
| «¡Lo estamos perdiendo!» Falla el corazón.
|
| Tan derrochador, sabroso, comido desde dentro.
|
| Esta sed de sangre se convirtió en parte de él.
|
| Nunca satisfecho, en su último momento se dio cuenta,
|
| Su incursión de la muerte había llegado a su fin. |