| maestro, te alabo
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| He venido aquí para domesticar
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| las exigencias de la carne
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| he venido a olvidar mi nombre
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| todos pensábamos que la luna
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| debe ser convertido en sangre
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| y eso es lo peor
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| faltar al que no viene
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| pero no queda más que obedecer
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| todas sus leyes de la riqueza
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| siempre luchando en ambos lados
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| sin negación, sin negación
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| maestro yo te sirvo
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| y sirvo la lengua
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| de fracaso y duda
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| vengo a venderte mi angustia
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| todos pensábamos que la luna
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| debe ser convertido en sangre
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| y eso es lo peor
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| tratar de complacer y por favor no
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| pero no queda más que obedecer
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| todas sus leyes de la riqueza
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| siempre luchando en ambos lados
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| sin negación, sin negación
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| si, no queda nada mas que obedecer
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| todas sus leyes de la riqueza
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| maestro, ¿estás tomando partido?
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| sin negación, sin negación
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| y se siente como primavera otra vez
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| hemos sellado esta sensación de nuevo
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| aunque trataste de cegarme
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| Todavía te vi sonrojarte
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| se siente como primavera otra vez
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| hemos sellado esta sensación de nuevo
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| aunque trataste de cegarme
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| aunque trataste de cegarme
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| no hacemos pausa, no descansamos
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| así que no hables, por favor no pruebes
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| mi nervio así, en una temporada como esta
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| no hacemos pausa, no descansamos
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| así que no hables, por favor no pruebes
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| mi nervio así, en una temporada como esta
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| trataste de cegarme
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| intentaste cegarme... |