| Hay un cierto tipo de genio
|
| Quien se enorgullece de saber tanto
|
| Se saltó mil duchas
|
| Porque él no necesita tocar
|
| Esconde sus caras de bastardo
|
| Detrás de gruesos paneles de vidrio
|
| Son todo lo que lo separa
|
| De la clase baja simiesca
|
| Y el hedor del amor sigue subiendo sigilosamente por su nariz
|
| A través de todos los mocos que sus senos nasales pueden contener
|
| Creyendo todas las mentiras que le han dicho
|
| Envejece, tan viejo
|
| Un viernes por la noche a solas con amigos
|
| Solo tiene uno o dos
|
| Son unos genios como él, ya ves
|
| Nada como todos ustedes
|
| Bromean y languidecen
|
| Con toda súplica ostentosa
|
| Todos están tan de moda y cuáles
|
| son maquinas subterraneas
|
| Y él no estará allí cuando Jesús venga
|
| Escribirá un libro sobre lo que encontraron sus estudios
|
| Y en el fondo aprenderá a temer el sonido
|
| De esperanza, de esperanza
|
| Él dice por qué debería intentarlo
|
| Dejaré que el aceite penetre en mi cara
|
| Hasta que brillen las espinillas
|
| Como pequeñas montañas colocadas en su lugar
|
| Este valle solitario, el mío
|
| Entre las colinas de la opulencia
|
| Crecen con la fuerza y el tiempo.
|
| Racimos escarlata brotan de la piel
|
| Para ocultar mis puntos perdidos
|
| Y él no estará allí cuando Jesús venga
|
| Escribirá un libro sobre lo que encontraron sus estudios
|
| Y en el fondo querrá escuchar el sonido
|
| De esperanza, de esperanza
|
| Cuando el mundo te apuñala por la espalda
|
| Lo peor que podrías hacer
|
| es volverse indiferente a
|
| No hay 'ellos'
|
| Sin brigada idiota
|
| Solo mil yous
|
| Igual de magullado |