Información de la canción En esta página puedes encontrar la letra de la canción Weill: Die Dreigroschenoper - Tango Ballad, artista - Ute Lemper. canción del álbum Ute Lemper - Punishing Kiss, en el genero Мировая классика
Fecha de emisión: 31.12.1999
Etiqueta de registro: Decca
Idioma de la canción: inglés
Weill: Die Dreigroschenoper - Tango Ballad(original) |
There was a time, now very far away |
When we set up together, I and she |
I got the brain, and she supplied the breast |
I saw her right, and she looked after me |
A way of life then, if not quite the best |
And when a client came, I’d slide out of our bed |
And treat him nice, and go and have a drink instead |
And when he paid up, I’d address him, «Sir |
Come any night you feel you fancy her» |
That time’s long past, but what would I not give |
To see that whorehouse where we used to live? |
That was the time, now very far away |
He was so sweet and bashed me where it hurt |
And when the cash ran out, the feathers really flew |
He’d up and say, «I'm going to pawn your skirt |
A skirt is nicer, but no skirt will do.» |
Just like his cheek, he had me fairly stewing |
I’d ask him straight to say what he thought he was doing |
Then he’d lash out and knock me headlong down the stairs |
I had the bruises off and on for years |
That time’s long past, but what would I not give |
To see that whorehouse where we used to live? |
That was the time, now very far away |
Not that the bloody times seem to have looked up |
When afternoons were all I had for you |
I told you she was generally booked up |
The night’s more normal, yeah, but daytime will do |
And when a client came, he’d slide out of our bed |
And treat him nice, and go and have a drink instead |
And when he paid up I’d address him, «Sir |
Come any night you feel you fancy her» |
That time’s long past, but what would we not give |
To see that whorehouse where we used to live? |
(traducción) |
Hubo un tiempo, ahora muy lejano |
Cuando nos instalamos juntos, yo y ella |
Tengo el cerebro y ella me dio el pecho. |
La vi bien, y ella me cuidó |
Una forma de vida entonces, si no la mejor |
Y cuando llegaba un cliente, me deslizaba fuera de nuestra cama |
Y trátalo bien, y ve y toma un trago en su lugar |
Y cuando pagaba, me dirigía a él, «Señor |
Ven cualquier noche que sientas que te gusta» |
Ese tiempo pasó hace mucho tiempo, pero ¿qué no daría yo? |
¿Para ver ese prostíbulo donde solíamos vivir? |
Ese era el tiempo, ahora muy lejano |
Fue tan dulce y me golpeó donde me dolía |
Y cuando se acabó el efectivo, las plumas realmente volaron |
Se levantaba y decía: «Te voy a empeñar la falda |
Una falda es mejor, pero ninguna falda servirá.» |
Al igual que su mejilla, me tenía bastante molesto |
Le pediría directamente que dijera lo que pensaba que estaba haciendo. |
Luego arremetía y me tiraba de cabeza por las escaleras. |
Tuve los moretones de vez en cuando durante años |
Ese tiempo pasó hace mucho tiempo, pero ¿qué no daría yo? |
¿Para ver ese prostíbulo donde solíamos vivir? |
Ese era el tiempo, ahora muy lejano |
No es que los tiempos sangrientos parezcan haber mirado hacia arriba |
Cuando las tardes eran todo lo que tenía para ti |
Te dije que generalmente estaba reservada |
La noche es más normal, sí, pero el día servirá |
Y cuando llegaba un cliente, se deslizaba fuera de nuestra cama |
Y trátalo bien, y ve y toma un trago en su lugar |
Y cuando pagaba me dirigía a él, «Señor |
Ven cualquier noche que sientas que te gusta» |
Ese tiempo pasó hace mucho tiempo, pero ¿qué no daríamos? |
¿Para ver ese prostíbulo donde solíamos vivir? |