| La batalla no se detiene, hemos llegado a los cuchillos.
|
| Respiramos ira y vivimos solo en duelos
|
| Este no es el caso, lamentablemente este no es el caso.
|
| Cruel tú, violento yo, es demasiado
|
| Discusiones en el tren, en los hoteles
|
| Peleas en casa, siempre tristes escándalos.
|
| Tus ojos tan bellos
|
| son rojos si no negros
|
| Este no es el caso, lamentablemente este no es el caso.
|
| Incluso la mitad de esta guerra es demasiado
|
| Porque vivimos como enemigos
|
| Si no sabemos estar solos
|
| Si me necesitas entonces
|
| Y siempre termino buscándote, siempre tú
|
| Siempre tú, sí... siempre tú
|
| Amigos partidistas a los que convencer, chantajes extraños
|
| Teléfono sonando toda la noche, nuevas amenazas para mañana
|
| Cuanto más dices que no, más dices que no, amor
|
| Tal vez puedas, tal vez realmente puedas
|
| Cansado de pelear, finalmente me acosté, exhausto, en la cama.
|
| Y veo tu dulce perfil dibujado en el techo
|
| Cuanto más dices que no, más dices que no, amor
|
| Tal vez puedas, tal vez realmente puedas
|
| Pero por qué vivir en las trincheras
|
| ¿Para luego buscarse cuando es de noche?
|
| Si dependes de mí entonces
|
| Y siempre termino buscándote, siempre tú
|
| Siempre tú, sí... siempre tú |