Información de la canción En esta página puedes encontrar la letra de la canción Wenn's Wackersteine auf dich regnet, artista - Reinhard Mey. canción del álbum Mr. Lee, en el genero Поп
Fecha de emisión: 05.05.2016
Etiqueta de registro: Electrola, Universal Music
Idioma de la canción: Alemán
Wenn's Wackersteine auf dich regnet(original) |
Weißt du, wie der kleine Junge auf der Nordseeinsel tollte |
Gleich am ersten Ferientag den Weg zum Strand erkunden wollte |
Wie er sich umdrehte und dich übermütig jubelnd rief |
Und dir zugewandt, lachend in den Stacheldrahtzaun lief |
Siehst du noch, wie diese abscheulichen, messerscharfen Spitzen |
Seine zarte Kinderhaut rechts unterm Ohr, am Hals aufritzten |
Ein fingerbreit nur am Verhängnis ging der Schnitt vorbei |
Auf Knien hast du ihn getröstet, als ob gar nichts gewesen sei |
Wenns Wackersteine auf dich regnet, zähl die hellen Augenblicke |
Zähl nicht deine Missgeschicke, zähl, womit dich das Leben segnet |
Zähl, womit dich das Leben segnet |
Wie war das, als sie dir ihren kleinen Hund in Obhut gaben |
Und dich flehentlich «Pass nur gut auf ihn auf!» |
beschworen haben |
Du hast so gut aufgepasst und doch ist er dir abgehau’n |
Hat sich einfach durchgewühlt, die Bestie, unterm Gartenzaun |
«Hey, bleib hier, du blöder Köter!», doch er ist schnell wie ein Wiesel |
Und du sprintest hinterher, er läuft genau vor diesen Diesel |
Reifen quietschen, weiße Wölkchen und der Riesenlaster hält |
Manchmal ist verbrannter Gummi der schönste Geruch auf der Welt |
Wenns Wackersteine auf dich regnet, zähl die hellen Augenblicke |
Zähl nicht deine Missgeschicke, zähl, womit dich das Leben segnet |
Zähl, womit dich das Leben segnet |
Manchmal fühlst du dich von allen guten Geistern verlassen |
Manchmal siehst du alle deine Glückssterne verblassen |
Manchmal scheint dir ein Bündel schwer zu tragen |
Dann zähl nicht deine Niederlagen, dein Versagen |
Es steht in den Apostelbriefen, es steht in allen Glückstarifen: |
«Es gibt im Leben keine Höhen, ohne Tiefen» |
Denk dran, wie der Zöllner dich am Flugplatz Frankfurt durchgewunken |
Hat, du kamst aus Amsterdam und hast so nach dem Zeug gestunken |
Und dein Rucksack mit dem «Atomkraft — nein danke!- Logo barst |
Randvoll vom Jahresbedarf des starken Rauchers, der du warst |
Weißt du noch, wie du mit Rita für die Mathearbeit übtest |
Voller Hingabe und wie du, der du kein Wässerchen trübtest |
Mit ner glatten 6 vor Freude in die Luft gesprungen bist |
Weil Rita vom Mathe üben nicht schwanger geworden ist |
Wenns Wackersteine auf dich regnet, zähl die hellen Augenblicke |
Zähl nicht deine Missgeschicke, zähl, womit dich das Leben segnet |
Zähl, womit dich das Leben segnet |
(traducción) |
Ya sabes cómo el niño pequeño retozaba en la isla del Mar del Norte. |
Quería explorar el camino a la playa el primer día de vacaciones. |
Cómo se dio la vuelta y te llamó con el ánimo en alto |
Y se volvió hacia ti, riendo, corrió hacia la cerca de alambre de púas |
¿Todavía ves esos horribles picos afilados como navajas? |
Su delicada piel de niño a la derecha debajo de la oreja, en el cuello |
El corte perdió el destino por solo un dedo |
Lo consolaste de rodillas como si nada hubiera pasado |
Cuando las rocas llueven sobre ti, cuenta los momentos brillantes |
No cuentes tus desgracias, cuenta con lo que la vida te ha bendecido |
Cuenta con lo que la vida te ha bendecido |
¿Cómo fue cuando pusieron a su perrito a tu cuidado? |
Y tú rogando «¡Cuídalo bien!» |
haber convocado |
Fuiste tan cuidadoso y, sin embargo, se escapó de ti. |
Acabo de cavar, la bestia, debajo de la cerca del jardín |
"¡Oye, quédate aquí, estúpido perro!", pero es rápido como una comadreja. |
Y corres detrás, él corre justo en frente de este diesel |
Los neumáticos rechinan, las nubes blancas y el camión gigante se detiene |
A veces, el caucho quemado es el olor más hermoso del mundo. |
Cuando las rocas llueven sobre ti, cuenta los momentos brillantes |
No cuentes tus desgracias, cuenta con lo que la vida te ha bendecido |
Cuenta con lo que la vida te ha bendecido |
A veces te sientes abandonado por todos los buenos espíritus |
A veces ves que todas tus estrellas de la suerte se desvanecen |
A veces un bulto parece pesado de llevar |
Entonces no cuentes tus derrotas, tus fracasos |
Está en las cartas de los apóstoles, está en todas las tarifas de felicidad: |
«En la vida no hay altibajos» |
¿Recuerdas cómo el oficial de aduanas te indicó que pasaras en el aeropuerto de Frankfurt? |
Hat, viniste de Amsterdam y apestaste a eso |
Y tu mochila con el logo «Energía nuclear - ¡no gracias!» estalló |
Rebosante de las necesidades anuales del fumador empedernido que estaba |
¿Recuerdas practicar con Rita para el examen de matemáticas? |
Lleno de devoción y como tú, que no enturbiaste un poco de agua |
Saltó de alegría con un suave 6 |
Porque Rita no se quedó embarazada de practicar matemáticas. |
Cuando las rocas llueven sobre ti, cuenta los momentos brillantes |
No cuentes tus desgracias, cuenta con lo que la vida te ha bendecido |
Cuenta con lo que la vida te ha bendecido |