| Realmente me desagradan las llamadas nocturnas que se tiran en la cama.
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| Y llenan mi alma de preocupación por los niños y los ancianos cercanos a mí.
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| Una casa cansada que se durmió al vuelo, despertada por un trino penetrante,
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| Amigo mío, de alguna manera envejecimos rápidamente: entendemos a los verdugos más que a las parteras.
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| Una vez todo en azul vaquero, la naturaleza ahora se viste de negro.
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| Mis esperanzas se desvanecen cada año y mi fuerza se desvanece cada día.
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| Voy a saltar al cielo, hay verdad en ellos, pero aquí las mentiras son repugnantes,
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| Y me llevaba tinta, aunque nadie escribía cartas desde allí.
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| Coro:
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| Pero no perfores, necrófago, no tengo miedo de tus ojos con anteojos.
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| Cuanto más terrible es tu mirada, más tranquilo estoy.
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| Eres mi alegría, eres mi sol, golondrina,
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| Ven por mí, amor, en primavera.
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| Eres mi alegría, eres mi sol, golondrina,
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| Ven por mí, amor, en primavera.
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| Sin mirar a la oficina de la Duma, saludo con la mano en un lugar tranquilo, con un manzano celestial, un montículo.
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| No traicionó a sus amigos y no fue un ladrón, trató de vivir como un verdadero poeta.
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| Viví como un verdadero músico, bebí melodías diluidas con vodka,
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| Y se desgarró la garganta, la garganta sobrecargada, por las zonas y escenarios de diferentes países.
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| Coro:
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| Pero no perfores, necrófago, no tengo miedo de tus ojos con anteojos.
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| Cuanto más terrible es tu mirada, más tranquilo estoy.
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| Eres mi amor, eres mi sol, golondrina,
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| Vuela para mí, alegría, en la primavera.
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| Eres mi amor, eres mi sol, golondrina,
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| Vuela para mí, alegría, en la primavera.
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| Volveré a la escuela de medicina y dejaré que me enseñen un poco más,
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| Cómo salvar de las convulsiones a un país epiléptico, liberado de cadenas.
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| Llegará la mañana, y en el entrecruzamiento de los cuerpos la tranquila Virgen dará el pecho al niño,
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| Y la llamaré al hospital de maternidad por teléfono, que, afortunadamente, no sonó por la noche.
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| Y la llamaré al hospital de maternidad por teléfono, que, gracias a Dios, no sonó por la noche.
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| Coro:
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| Pero no perfores, necrófago, no tengo miedo de tus ojos con anteojos.
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| Cuanto más terrible es tu mirada, más tranquilo estoy.
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| Eres mi sol, eres mi alegría, golondrina,
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| Ven por mí, amor, en primavera.
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| Eres mi sol, eres mi alegría, golondrina,
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| Ven por mí, amor, en primavera. |