| En Rimini la playa ya que está vacía, casi inútil en marzo
|
| Desierta en verano, en cada símbolo idiota y festivo
|
| Y nosotros, sin un poco de ironía, entre conchas y cuarzos
|
| Para inventar la primavera juntos
|
| Había llovido lento y sin pausa, casi hasta ahora
|
| Golpeando en los postes de la playa, el mar se rompió en pedazos
|
| En el restaurante vacío, el camarero, absorto y lento
|
| Estaba cifrando el rompecabezas cumulonimbus
|
| Luego realizando ese inevitable y abusado ritual
|
| Corrimos valientemente y descalzos a lo largo de la costa
|
| Ese mar cansado era verde botella, el aire una habitación gris...
|
| Descubrimos que hoy el mar deja un pobre naufragio
|
| Naufragios de alquitrán y latas oxidadas
|
| Hablar era solo otro crimen inútil contra nuestras vidas...
|
| ¿Hablar de qué entonces? |
| ¿De ese vino que está demasiado frío y un poco pasado?
|
| ¿O de esa fritura mixta que allí se da con natural mala gana?
|
| A los que están tristes por derecho propio como un limón ya usado
|
| Da aún más tristeza comer mal...
|
| Y decir que quería darte un cumpleaños un poco diferente
|
| Pero con nosotros, turistas fuera de temporada, todo salió mal:
|
| La noche, una cosa ya se fue, la mañana perdida
|
| Y tal vez ya se desperdicia la tarde...
|
| Sin embargo, a pesar de todo, habíamos estado bien juntos.
|
| Así, sin futuro, en la incertidumbre suavizada
|
| Pensé: "¿Hacerlo o no? |
| ¿Hablar o no? |
| ¿Permanecer juntos y luego cambiar de vida?
|
| Pero si hubiéramos sido una pareja más entre muchas
|
| Habríamos transformado todo en esa pequeña alegría.
|
| ¿O habríamos luchado por desahogar el grito de aburrimiento en cualquier momento?
|
| Tal vez una pregunta inútil, como tal vez fue inútil ese día.
|
| Para ser tomado como vino, sin calcular el resto
|
| Nos despedimos rápido y yo también me apresuré a regresar.
|
| Todavía es temprano en la tarde de marzo ... |