Información de la canción En esta página puedes encontrar la letra de la canción Die tote Kirche, artista - L'âme Immortelle. canción del álbum Lieder die wie Wunden bluten, en el genero Электроника
Fecha de emisión: 07.11.2004
Restricciones de edad: 18+
Etiqueta de registro: Trisol
Idioma de la canción: Alemán
Die tote Kirche(original) |
Auf dunklen Bänken sitzen sie gedrängt |
Und heben die erloschnen Blicke auf |
Zum Kreuz. |
Die Lichter schimmern wie verhängt |
Und trüb und wie verhängt das Wundenhaupt |
Der Weihrauch steigt aus güldenem Gefäß |
Zur Höhe auf, hinsterbender Gesang |
Verhaucht, und ungewiß und süß verdämmert |
Wie heimgesucht der Raum. |
Der Priester schreitet |
Vor den Altar; |
doch übt mit müdem Geist er |
Die frommen Bräuche — ein jämmerlicher Spieler |
Vor schlechten Betern mit erstarrten Herzen |
In seelenlosem Spiel mit Brot und Wein |
Die Glocke klingt! |
Die Lichter flackern trüber — |
Und bleicher, wie verhängt das Wundenhaupt! |
Die Orgel rauscht! |
In toten Herzen schauert |
Erinnerung auf! |
Ein blutend Schmerzensantlitz |
Hüllt sich in Dunkelheit und die Verzweiflung |
Starrt ihm aus vielen Augen nach ins Leere |
Und eine, die wie aller Stimmen klang |
Schluchzt auf — indes das Grauen wuchs im Raum |
Das Todesgrauen wuchs: Erbarme dich unser — |
Herr! |
(traducción) |
Se sientan hacinados en bancos oscuros |
Y recoger las miradas muertas |
a la cruz |
Las luces brillan como veladas |
Y turbia y qué velada es la cabeza de la herida |
El incienso sube de la vasija de oro |
A las alturas, canción moribunda |
Respirado, e incierto y dulcemente atenuado |
Cómo embrujada la habitación. |
el sacerdote camina |
frente al altar; |
sin embargo, practica con un espíritu cansado |
Las costumbres piadosas: un actor patético |
Antes de malas oraciones con corazones congelados |
En un juego sin alma con pan y vino |
¡La campana suena! |
Las luces parpadean tenuemente— |
¡Y más pálida, qué velada está la cabeza herida! |
¡El órgano ruge! |
En corazones muertos se estremece |
recordatorio arriba! |
Una cara sangrante de dolor |
Se envuelve en la oscuridad y la desesperación |
Lo mira fijamente con muchos ojos en el vacío. |
Y uno que sonaba como las voces de todos |
Sollozos mientras el horror crecía en la habitación |
Creció el horror de la muerte: Ten piedad de nosotros— |
¡Señor! |