| Escucho voces, no creas que estoy loco
|
| Puedo oír mi corazón tratando de decirle a mi cabeza
|
| Tómalo con calma
|
| Demasiadas opciones, demasiados ángulos
|
| Todos los cabos sueltos acaban atados en enredos
|
| ¿Quién tiene la palabra, quién tiene el megáfono?
|
| ¿Quién está tratando de susurrar en mi oído?
|
| ¿Quién está en la calle, quién está en el asiento trasero?
|
| ¿Quién va a dirigir?
|
| Escucha tu vida-vida-vida-vida
|
| Y lo que hay en el interior-lado-lado-lado
|
| Todos los demás sonidos, baja el volumen
|
| Escucha tu vida-vida-vida-vida
|
| Todo es santo, todo es sagrado
|
| Incluso en lo mundano, encontrarás que nada se desperdicia
|
| Cada latido del corazón, late por uno más grande
|
| Cada aliento destinado a profesar a tu creador
|
| Más allá de la charla, más allá del ruido
|
| Hay una voz más tranquila y más pequeña
|
| Estar embelesado, oído en el suelo
|
| ¿Qué es ese sonido?
|
| Escucha tu vida-vida-vida-vida
|
| Y lo que hay en el interior-lado-lado-lado
|
| Todos los demás sonidos, baja el volumen y
|
| Escucha tu vida, vida, vida, vida
|
| Deja que el Espíritu fluya, ay, ay, ay
|
| Y deja que el Espíritu te muestre
|
| Todo lo que Él estaba destinado a
|
| Sólo cuando aprendes a
|
| Escucha tu vida-vida-vida-vida
|
| Todo el alboroto, todo el alboroto y todo el ruido
|
| Encuentra tu espacio, todo es gracia, conoce tu voz
|
| Todo el alboroto, todo el alboroto y todo el ruido
|
| Encuentra tu espacio, todo es gracia, conoce tu voz
|
| Escucha tu vida-vida-vida-vida
|
| Y lo que hay en el interior-lado-lado-lado
|
| Todos los demás sonidos, baja el volumen y
|
| Escucha tu vida, vida, vida, vida
|
| Deja que el Espíritu fluya, ay, ay, ay
|
| Deja que el Espíritu te muestre
|
| Todo lo que Él estaba destinado a
|
| Sólo cuando aprendes a
|
| Escucha tu vida-vida-vida-vida
|
| ¡Escucha tu vida! |