| En los registros, el sonido simplemente se desvanece
|
| Los jugadores se hacen cada vez más pequeños
|
| Vuelven a sus casas en los cables
|
| Con un último riff y un último grito
|
| ¿Y alguna vez lo lograste en la gran ciudad, amigo?
|
| ¿O te estrellaste en algún callejón lluvioso?
|
| Vi seis ángeles envolviéndote en un periódico
|
| Ah, pero eso podría haber sido un sueño.
|
| Solía acostarme despierto cuando tenía cinco años.
|
| Por la radio Motorola
|
| Estaba tratando con todas mis fuerzas de no irme a dormir
|
| Entonces sabría a dónde van esas personitas
|
| Y en los registros, el sonido se desvanece
|
| Los jugadores se hacen más y más pequeños y más pequeños
|
| El regreso a sus hogares en los alambres y la cera y los casetes y
|
| las fichas
|
| Con un último pequeño riff y un último pequeño grito
|
| Diciendo algo como:
|
| Nena, te quiero, nena, te necesito, nena, te amo, oh nena, lo hago
|
| Nena, te quiero, nena, te necesito, nena, te amo, oh nena, lo hago
|
| Y sus pequeños conjuntos se vuelven más y más pequeños
|
| Y sus pequeñas guitarras se vuelven diminutas, diminutas, diminutas
|
| Y sus pequeños pedales waa-waa bajan del tamaño de una cabeza de fósforo
|
| y desaparecer
|
| E incluso sus pequeños semirremolques, bueno, se vuelven diminutos, diminutos
|
| Y sus pequeños autobuses turísticos se vuelven más pequeños...
|
| Desvanecerse
|
| Todos tienen que volver a LA
|
| Tienen una gran reunión de negocios importante mañana por la mañana.
|
| En un edificio de 25 pisos pero es diminuto, diminuto, diminuto
|
| Tengo que volver a LA
|
| Los escucho cantarlo mientras cruzan las Montañas Rocosas
|
| Nena te quiero, nena te amo, nena te necesito, nena te necesito |