| Hay ríos de llanto en sus tobillos, atados con cadenas
|
| Y en el pan de centeno se hornea
|
| Su mochila está cosida de penas, pesadillas
|
| Una sonrisa en su rostro coagulado
|
| El anhelo de las caricias ha blanqueado su fiebre
|
| Y con el mismo veneno contamina a sus hijos
|
| Maldijo y nos creó, odiando su mirada.
|
| y no contento con eso
|
| Y pronunció palabras que ahora deben ser disfrutadas por todo el pueblo y la tierra del norte.
|
| Si te alegras no lo compartas con los demás, sé tú solo portador de tu propio dolor
|
| Codicia lo que tiene el otro, cambia tu mujer por la mujer del prójimo
|
| Que la casa roja, el campo de patatas, la playa y la minivan te den suerte
|
| Se trata de Dios Kekkonen, siguiente
|
| Su vida es una actuación como enero goteando
|
| La bandera en la media barra, siempre hay un patio
|
| Cree en la misma línea de lotería
|
| Solo se puede celebrar el Primero de Mayo o el Solsticio de Verano.
|
| Sus canciones suenan a añoranza y añoranza
|
| Esa testaruda cabeza de hueso está mintiendo, enterrada
|
| Al mausoleo adorado
|
| Y pronunció palabras que ahora deben ser disfrutadas por todo el pueblo y la tierra del norte.
|
| Si te alegras no lo compartas con los demás, sé tú solo portador de tu propio dolor
|
| Codicia lo que tiene el otro, cambia tu mujer por la mujer del prójimo
|
| Que la casa roja, el campo de patatas, la playa y la minivan te den suerte
|
| ¿Quién pronunció palabras que toda la nación y el país del norte ahora pueden disfrutar?
|
| Que la casa roja, el campo de patatas, la playa y la minivan te den suerte
|
| Y pronunció palabras que ahora deben ser disfrutadas por todo el pueblo y la tierra del norte.
|
| Si te alegras no lo compartas con los demás, sé tú solo portador de tu propio dolor |