| Empápate del sonido del susurro eterno
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| Deja que se formen recuerdos enterrados
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| La sombra de la duda
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| Todos esos años cuando
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| Tus sentidos proliferarían
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| Cerraste las puertas pero desataste a los sabuesos
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| Dijiste las palabras de la razón
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| Disparaste tus instintos a voluntad
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| Te casaste con la lluvia a través de las estaciones
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| De emociones eternas
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| Sigo esperando una llamada
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| Como la oscuridad caerá
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| El que nunca se instala dentro
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| ¿Recuerdas elegir la muerte cuando éramos jóvenes?
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| Dejamos que florezcan los momentos más oscuros
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| Y mantuvo nuestro destino rechazado
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| No queda nada de cuando solíamos correr
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| En los valles de nuestros sueños
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| Ya habíamos vendido el sol
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| Dos mundos chocando en un invierno despiadado
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| Cansadamente fuegos ardiendo dentro de tu alma
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| Imaginaciones empujando sus pautas
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| Y roba la luz fuera de control
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| Dijiste las palabras de la razón
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| Disparaste tus instintos a voluntad
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| Te casaste con la lluvia a través de las estaciones
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| De emociones eternas
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| Sigo esperando una llamada
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| Como la oscuridad caerá
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| El que nunca se instala dentro
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| ¿Recuerdas haber elegido la muerte?
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| Cuando eramos jovenes
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| Dejamos que florezcan los momentos más oscuros
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| Y mantuvo nuestro destino rechazado
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| No queda nada de cuando solíamos correr
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| En los valles de nuestros sueños
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| Ya habíamos vendido el sol
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| ¿Recuerdas haber elegido la muerte?
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| Cuando eramos jovenes
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| Dejamos que florezcan los momentos más oscuros
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| Y mantuvo nuestro destino rechazado
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| No queda nada de cuando solíamos correr
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| En los valles de nuestros sueños
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| Ya habíamos vendido el sol |