| Ahora era un hombre que trabajaba con sus manos
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| Solo en un motor encontró la paz
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| Podía hacer que un motor cantara como un pájaro
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| Él podría encontrar su único tipo de liberación
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| Cuando estaba hasta los codos en la grasa
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| Ella soñó con un tiempo para pintar
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| Mientras ella limpiaba las manchas de la alfombra
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| Ella jugaba todo el día con sus hijos.
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| Y trata de recibirlo con una bienvenida y un abrazo.
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| Mientras llegaba arrastrando los pies por la casa encogiéndose de hombros
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| Te digo que la suciedad se mete debajo de las uñas
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| Y el odio se mete debajo de la piel
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| Pero un sueño tiene una forma de llegar al hueso
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| Y el corazón de un cuerpo en el que está
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| Mientras él estaba haciendo magia con sus máquinas de pistón
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| Ella estaba limpiando el desorden que él había dejado atrás
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| Ella estaba tratando de llegar hasta el final del día
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| Con un poco de tiempo vacío
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| Y haz la pintura que significó paz mental
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| Te digo que la suciedad se mete debajo de las uñas
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| Y el odio se mete debajo de la piel
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| Pero un sueño tiene una forma de llegar al hueso
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| Y el corazón de un cuerpo en el que está
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| Bueno, un día ella no se molestó en hacer su cama
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| Ella apresuró a todos los niños a la puerta
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| Y ella dejó ir las facturas y el marketing
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| Y ella fue y casi compró una tienda de artículos de arte
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| Dio la casualidad de que ese día se puso a pensar
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| De la grasa que siempre cubrió su piel
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| Así que salió del garaje un poco temprano.
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| Se afeitó, se hizo la manicura y se cortó
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| Salió limpio como un maniquí de yeso
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| Llegó a casa a toda prisa
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| Pero casi no reconoce el lugar.
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| Parecía que había sido golpeado por un huracán
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| Había lienzos llenando cada espacio abierto
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| Y ella tenía pintura en toda su cara
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| Te digo que la suciedad se mete debajo de las uñas
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| Y el odio se mete debajo de la piel
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| Pero un sueño tiene una forma de llegar al hueso
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| Y el corazón de un cuerpo en el que está
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| Ambos se quedaron atónitos en silencio.
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| Entonces su risa estalló como un grito.
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| Y salió a hacer magia en la cocina
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| El hombre limpio aprendiendo de qué se trataba cocinar
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| Y la chica sucia pintando, su corazón desordenado
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| Te digo que la suciedad se mete debajo de las uñas
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| Y el odio se mete debajo de la piel
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| Pero un sueño tiene una forma de llegar al hueso
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| Y el corazón de un cuerpo en el que está |