| Desde que envejecemos
|
| Ya no hay hombre de arena
|
| Sentado en el borde de la cama
|
| Para cantarnos sus fábulas
|
| Al comienzo de la noche
|
| Como el amanecer de nuestras vidas
|
| Desde que envejecemos
|
| Que ya no somos niña y niño
|
| nos gusta recordar
|
| Que los dragones han sido derrotados
|
| Ya no nos atrevemos a soñar con eso
|
| Los héroes están cansados
|
| No hay canción de cuna para adultos.
|
| Porque queríamos crecer
|
| Nos tragamos nuestra pastilla
|
| necesitamos dormir
|
| Porque nos dejamos envejecer
|
| No hay canción de cuna para los adultos
|
| Porque todos queríamos huir
|
| Lo que queda en nosotros como niños
|
| Ya no podemos conciliar el sueño
|
| Con esa tierna sonrisa
|
| Porque nos dejamos envejecer
|
| Desde que envejecemos
|
| Todos nuestros recuerdos congelados
|
| En un álbum amarillento
|
| no nos van a animar
|
| Para traer la vida de vuelta
|
| A nuestros pobres ojos ojeras
|
| Desde que envejecemos
|
| Y trabajamos para pagar
|
| Nuestro pedacito de paraíso
|
| Soñamos con ser mecidos
|
| Por otros brazos magullados
|
| Por un momento de descanso
|
| No hay canción de cuna para adultos.
|
| Porque queríamos crecer
|
| Nos tragamos nuestra pastilla
|
| necesitamos dormir
|
| Porque nos dejamos envejecer
|
| No hay canción de cuna para los adultos
|
| Porque todos queríamos huir
|
| Lo que queda en nosotros como niños
|
| Ya no podemos conciliar el sueño
|
| Con esa tierna sonrisa
|
| Porque nos dejamos envejecer
|
| Desde que envejecemos
|
| Y que cuerpos extraños
|
| Vino a profanar nuestras camas
|
| nunca te quedes ahí
|
| Un poco de insomnio
|
| Lo que nos gustaría compartir
|
| Desde que envejecemos
|
| Y se necesitan dos respiraciones
|
| Para apagar las velas
|
| Hay este grito que ahogamos
|
| En el silencio de nuestras noches
|
| Donde nuestros sollozos engullen
|
| No hay canción de cuna para adultos.
|
| Porque queríamos crecer
|
| Nos tragamos nuestra pastilla
|
| necesitamos dormir
|
| Porque nos dejamos envejecer
|
| No hay canción de cuna para los adultos
|
| Porque todos queríamos huir
|
| Lo que queda en nosotros como niños
|
| Ya no podemos conciliar el sueño
|
| Con esa tierna sonrisa
|
| Porque nos dejamos envejecer |